............Shiro: ¡Buenas!
............César: ¿Qué pasa?
............S: Nada, que me aburría.
............C: Ya sé que sirvo muy bien de payaso para animar las fiestas, pero podrías entretenerte en buscarle un nombre no traumatizante a Pancho, vuestra nueva perrita.
............S: Oh, ya se pelea mi padre con las viejas por eso: que por qué la llamamos Pancho y no Panchita. Y se enfada mi padre.
............C: Es que, si no, va a tener problemas de identidad sexual, y hasta puede que llegue a querer operarse.
............S: Ya… Por cierto, mañana se lo va a pasar teta mi padre, porque le toca ducha.
............C: Si se resiste, necesita algo más contundente que una ducha. Te explico los pasos: se llena la bañera, se pone uno un traje de neopreno, se coge en brazos al mamífero correspondiente, se le lanza al agua, se sale corriendo y se cierra la puerta.
............De todos modos, deberíais bañar a tu padre más a menudo.
............S: Eh..., sí… Pero hay un pequeño detalle: no tenemos bañeras.
............C: Ah, en ese caso, habrá que llevar al mamífero correspondiente a una de las fuentes de Sol.
............S: Ya, bueno… Creo que voy a aburrirme otro rato.
............(Nota mental: mi nueva técnica para espantar a la gente da buenos resultados en los conejillos de Indias; habrá que pasar al especimen definitivo: la señorita S.)
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