............Voy a seguir fomentando mi imagen de metepatas* con un suceso de hace varios años.
............Julio de 2005. Yo era monitor de un grupo 'scout' (sí, habéis leído bien, 'scout') en mi Alicante natal. Apenas una semana antes del macrocampamento que íbamos a organizar en los Pirineos, saltaron todas las alarmas: ¡el mayor de los imprevistos nos sobrevino! Total, que a las dos de la mañana tuvimos que hacer una reunión de urgencia en un bareto.
............Yo, que venía de las fiestas de mi pueblo con un par de cervezas de más, me seguí bebiendo otras tantas cervezas en el bar de turno. Así, cuando terminamos con nuestro gabinete de crisis, yo no iba borracho pero me entraron unas ganas terribles de mear. Me dirigí al aseo del bar (que por las mañanas era una cafetería-heladería) y pensé: "Qué entrada tan grande tiene este bar", cuando, de repente: "¡PLOM!", me comí la luna entera del bar. Se hizo el silencio. Me giré hacia mis compañeros, que estaban todos mirándome con una expresión perpleja. Eso sí, en cuanto vieron que seguía vivo, soltaron una carcajada tan grande que decidí ir al aseo. A ver si, además de la cerveza, también meaba mi vergüenza.
............Julio de 2005. Yo era monitor de un grupo 'scout' (sí, habéis leído bien, 'scout') en mi Alicante natal. Apenas una semana antes del macrocampamento que íbamos a organizar en los Pirineos, saltaron todas las alarmas: ¡el mayor de los imprevistos nos sobrevino! Total, que a las dos de la mañana tuvimos que hacer una reunión de urgencia en un bareto.
............Yo, que venía de las fiestas de mi pueblo con un par de cervezas de más, me seguí bebiendo otras tantas cervezas en el bar de turno. Así, cuando terminamos con nuestro gabinete de crisis, yo no iba borracho pero me entraron unas ganas terribles de mear. Me dirigí al aseo del bar (que por las mañanas era una cafetería-heladería) y pensé: "Qué entrada tan grande tiene este bar", cuando, de repente: "¡PLOM!", me comí la luna entera del bar. Se hizo el silencio. Me giré hacia mis compañeros, que estaban todos mirándome con una expresión perpleja. Eso sí, en cuanto vieron que seguía vivo, soltaron una carcajada tan grande que decidí ir al aseo. A ver si, además de la cerveza, también meaba mi vergüenza.
............* Metepatas torpe, sí.
2 comentarios:
jaja
Si lo peor es que lo achacarían a la cerveza, cuando todo el mundo que se ha dado un cachete de estos sabe que es por pensar en cosas que no vienen a cuento...
Porque si no, ¿que hacías pensando en la entrada tan grande que tenía el bar ^^?
Saludines,
YoMisma
Lo más gracioso de todo es que en el cristal (recien limpiado por las camareras y razón primgenia de mi error) se quedó la huella de mi cara. Porque lo habrán limpiado. Si no, dentro de varios siglos se hablaría del Cristal Santo de Alicante.
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